top of page

BODY POSITIVITY

  • Foto del escritor: YURI
    YURI
  • 31 may 2020
  • 2 Min. de lectura

Fernanda Valverde Madera



Belleza; una sola palabra con infinitas definiciones. La sociedad nos ha enseñado a valorar la belleza de cada una de nosotras con base en lo que vemos todos los días en las redes sociales. Todos los anuncios publicitarios e influencers en nuestro feed parecen tener mujeres perfectas. Cuerpos perfectos, caras perfectas, nada como lo que vemos en nosotras mismas y hasta la más fuerte de nosotras puede llegarse a sentirse insegura al compararse a estos modelos.


Contrario a todo lo que la sociedad nos ha enseñado a valorar, tenemos al movimiento de Body Positivity, que nos habla de amar nuestros cuerpos a pesar de sus defectos, sentirnos cómodas en nuestra propia piel, eliminar los estándares imposibles de belleza y construir nuestra propia autoestima.


Hemos sido víctimas de los estándares sociales que la industria nos ha impuesto. Nos dicen que podemos ser fuertes, hermosas, invencibles… Siempre y cuando nos veamos de cierta manera. Es en este momento que comenzamos a buscar cierta validación social que, siendo realistas, jamás vamos a alcanzar.


Creemos que cuando alcancemos ciertas metas como eliminar el acné, alcanzar cierto peso o comprar cierto tipo de ropa, nos sentiremos más seguras de nosotras mismas y al fin podremos alcanzar esta aceptación en lo que nos enseñaron que es belleza estética. La realidad es que a pesar de que logres los objetivos que te propongas, por mucho que trabajes en tu apariencia, si te odias a ti misma y el cuerpo que tienes, jamás vas a alcanzar la validación más importante: La tuya misma.


No se trata de forzarnos a ignorar el ideal dominante de belleza, pues esto no es para nada realista y puede llegar a perjudicarnos haciendo que nos sintamos culpables por qué no nos amamos tal y como somos. Inclusive hay estudios que comprueban que cuando personas con baja autoestima se repiten cosas positivas a sí mismos sin realmente creerlo, hace que se sientan aún peor, causando un efecto contrario a lo que el movimiento tiene como objetivo lograr.


Body Positivity no solo es enfrentar la manera en la que la sociedad valora lo atractivo, si no de aceptar nuestras diferencias raciales, de sexualidad, de genero y de discapacidades. Está bien admitir que no amas cada centímetro de tu cuerpo. No está mal sentirse indiferente o neutral ante la manera en la que te ves físicamente. Body Positivity es aceptar tu valor como persona independientemente de tu tamaño, color, raza, sexualidad o discapacidades.

Este proceso de aceptación no será sencillo. No solo nos costará que la sociedad en general comience a aceptar el hecho de que somos físicamente diferentes, sino que también va a requerir un esfuerzo personal continuo y en muchos casos, los objetivos del movimiento no son algo que se pueda alcanzar a la perfección.


No se trata de un cambio radical, se trata de un cambio progresivo. Si dejamos que nuestras mentes sean diferentes y podemos llegar a apreciar cada una de ellas, ¿por qué no podemos hacer lo mismo por nuestros cuerpos? Comencemos a medir nuestra belleza por nuestra amabilidad y carácter y así, dejar de hacerlo por cosas superficiales como lo es nuestras proporciones corporales.


Esto es el movimiento Body Positivity. Esto es lo que la sociedad nos debería de enseñar. Esto es lo que somos. Comencemos a aceptarnos.

Comments


bottom of page