Ana López Zurita
Me encanta ver a niñas y señoras disfrazadas de “Catrinas” en las pocas fiestas de “Halloween” que se empiezan a celebrar en Cataluña.
Aquí las tradiciones son “molt importants”, la gente se siente orgullosa de ellas y luchan a toda costa por mantenerlas. Pero lo cierto es que los jóvenes adoptan lo más divertido de las diferentes culturas y entre ellas, las fiestas de Halloween que nada tienen que ver con “La llegada de la Castañera”.
En Barcelona, “La Castanyera” es una señora mayor que da castañas asadas a los niños. Le gente se reúne el día de Todos los Santos para cenar y comer castañas y boniatos (o “panallets”) de postre o sobre mesa (todo el ambiente huele a Otoño). Pero los niños prefieren salir a las casas disfrazados de fantasmas, brujas o ninjas y pedir “Truco o trato” para recibir caramelos. Poco a poco, los catalanes empiezan a abrir sus puertas preparados con “chuches” para este día y los padres resignados acompañan a sus hijos puerta por puerta.
Las tradiciones navideñas merecen una mención aparte, pero la que no había oído nunca es la del “Caga Tió”.
En los días previos a Navidad, los padres van a la montaña con sus hijos para encontrar al Tió (un tronco con cuatro patas, una cara sonriente, una manta y un gorro o “Barret” catalán rojo) y se lo llevan a casa para darle “de comer” (fruta, restos de comida, galletas) y se ponga bien gordito.
En Nochebuena, después de cenar, los niños le dan golpes en el lomo con un palo cantando una canción: Caga Tió, neules i torrons, sinó cagues ara… ¡et donaré un cop de bastó! (¡Caga Tió, galletas y turrones, si no cagas ahora, te daré un golpe con el bastón!)…….. Y el Tió caga regalitos que están debajo de la manta, se supone que de toda la comida que le han estado dando durante días.
Sí, para las miradas extranjeras, es bastante “chocante” el concepto de “cagar” regalos, pero los catalanes tienen una relación muy curiosa con este acto biológico.
El “Caganer” es una figura del pesebre y representa a un pastor agachado, con los pantalones bajados y cagando. Según dicen, está abonando la tierra para hacerla más fértil para el año que viene y representa salud y prosperidad…
Desde luego, los viajes ilustran.
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