Nicolás Rodríguez Esquivel
La mentalidad humana no tiene limites en cuanto a sacar provecho se refiere; hay gente que ve el lucro en las piedras mismas (literalmente). En un principio, esto no tendría muchos problemas o dilemas, pero estos surgen cuando el beneficio se obtiene mediante el engaño o el daño a ajenos; y la medicina no es la excepción.
Hoy en día, la industria farmacéutica y el sector salud son de los negocios más lucrativos debido, sobre todo, a que se sostiene de la necesidad de la gente.
A ver, que no digo que no se le deba pagar a un médico o a un farmacéutico por su trabajo o producto, pero hay una gran distancia entre cobrar el precio justo a exprimir al máximo y sacar provecho de la desesperación de una persona por un dolor o mal que lo aqueje o a uno de sus seres queridos.
Y es que no importa si una persona este muriendo o decayendo, siempre estará sujeta a la merced de los precios que las empresas impongan sobre los tratamientos o medicamentos, cambiando sus tarifas a su antojo.
Debemos de ver a la salud y el bienestar como algo vital que se sobreponga al provecho económico; debemos volver a ver con moral y humanidad la medicina, como la ciencia honrada que es.
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